“Confieso que he escrito a tientas, dejándome llevar por la aventura misma de escribir, lo cual fue equivalente a un descubrimiento. La figura del niño que trabajo, es una iconografía que retrata el imaginario de la infancia. Las batallas y las representaciones del bien y el mal, no representan literalmente alguna fuerza física o inmaterial, sino la metáfora de la lucha situada en la mente. hay un sentido para los cielos que me gustaría compartir y se refiere a todo lo que se puede abarcar con el amor”.
Udumbara: flor que nace muy raramente cada tres mil años y que sirve de punto de comparación para evocar la rareza de un acontecimiento.
— por Rauli
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